“El Presidente Chávez instruyó al ministro del Poder Popular para la Vivienda, Ricardo Molina, para que en ocho días se presente un cronograma realista y viable para la culminación de construcciones que tienen hasta cuatro años paralizadas, por lo que no se puede acusar al Gobierno Bolivariano de que no las va a concluir”, expresó el alto funcionario a través de Venezolana de Televisión, al concluir una asamblea realizada con los voceros de estos conjuntos residenciales.
Jaua dio a conocer los tres grandes bloques de acciones en los que trabajará el Gobierno Nacional a partir de ahora, en consonancia con los propietarios afectados, para dar solución definitiva a estas personas que aún esperan por su vivienda.
El primer bloque consiste en entregar de manera inmediata todos los apartamentos que estén listos, mientras que en paralelo pueda desenredarse la madeja jurídica que las mafias inmobiliarias habían creado para estafar a los compradores.
El segundo bloque consiste en que el Estado asumirá la propiedad de los inmuebles, tal como lo establece la medida de expropiación para poder concluir los edificios que se encuentran pendientes. “Aquellas obras que no están concluidas tienen que ser propiedad del Gobierno Bolivariano, para que éste pueda invertir en ellas y concluirlas”, expresó el alto funcionario del Gobierno Nacional.
El tercer bloque consiste en ordenar la congelación de cuentas y actividades de estas empresa privadas para tratar de recuperar el dinero invertido por los compradores de los apartamentos.
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